Día 12 - Diario de nuestro primer viaje a Europa - Lore y Javis

10 de agosto 2007
Italia
Padova - Florencia

Ésta mañana, despertamos algo somnolientos y bajamos a desayunar. Nos dirigimos hacia la ciudad de Florencia, la ciudad del arte en Italia, (arquitectos, pintores, escultores, etc.). Como las calles del centro de la ciudad son muy estrechas, no permiten que el autobus entre muy cerca de ésta zona y por eso nos pidieron que prepararamos un equipaje de mano solo con una muda para pasar la noche y que el autobus se quedara con todas las maletas, pues bajando de él, hubo que caminar un tramo hacia el hotel. Luego de registrarnos y subir nuestras cosas, nos dirigimos hacia el centro para encontrarnos con la guía que nos daría la visita panorámica a pie por Florencia. Empezamos en la catedral de Maria de la Fiore (Flor), según nuestra guía, la catedral más grande de Europa, (incluso más que la de San Pedro en Roma) y en su momento, la más grande del mundo (en realidad tiene una cúpula que es más grande que la de San Pedro por dentro, aunque por fuera no lo es, y en realidad la de San Pedro es, en área, la más grande aún). Está construida con piedras de color verde, blanco y rojo, que significan la esperanza, la fé y el amor; por fuera está repreta de imágenes de los evangelios y la Biblia, y en cada detalle se plasma un pasaje de la misma. Nos explicaron que su construcción ilustra a la santísima trinidad: la catedral al Padre, la torre campanario al hijo y el Baptisterio (lugar para bautizar) que está en frente al Espíritu Santo. Éste baptisterio tiene una puerta de oro que tardó 27 años de trabajo en hacerse y cuyo valor en oro equivale al precio de una ciudad vecina entera!! Está compuesta por 10 recuadros y en cada uno de ellos, en relieve de oro, se plasman escenas importantes del antiguo testamento: la creación, Caín y Abel, el Diluvio, José y sus hermanos, Moisés, el Rey David y el Rey Salomón entre otros. Pasamos de ahí a ver el Arco del centro, está ubicado en una pequeña plazuela que, en el siglo XIX, se decidió que estaba muy feita y derribaron abslutamente TODO para construir de forma mas bella y adecuada al resto de su ciudad (que exagerados!!, pero bueno...) La época de oro de Florencia fue durante el renacimiento, siglo XV aprox. y en esos tiempos, llegó a vivir a Florencia una familia muy importante económicamente: los Medicci, propietarios de 21 bancos en el mundo, su escudo familiar constaba de esferitas de oro auténtico y cada una ellas (en ese tiempo, así eran los lingotes de oro) representaba cada uno de los bancos de los que eran dueños. Con el tiempo fueron perdiendo algunos bancos, hasta que su escudo quedó solamente con 6 esferas. Llegamos hasta el "Puente Veccio" o viejo, sobre el cuan hay un pasillo (tipo segundo piso de periférico, pero en puente cerrado), que uno de los Medicci construyó para ahorrarse el viaje entre su casa y las oficinas de la ciudad sin pisar la calle. A lo largo de esa calle esta repleto de locales que se dedican a la venta de oro florentino (carísimo por cierto), pero en aquella época, era una calle de carnicerías, al no haber refrigeradores, la carne se podría fácilmente y apestaba, así que la lanzaban sin más al río Arno que cruza la ciudad (sobre éste se encuentra el Puente Veccio); como a uno de los Medicci le molestaba ese olor, sencillamente los mandó quitar a todos y los sustituyó por los negocios de oro que se ven a la fecha.
Caminamos a la Plaza de la Signiora, en donde se ubica "El Museo más grande y famoso del mundo" (según nuestra guía italiana, pero podemos preguntarle a un parisino a ver que piensa je je) con obras, específicamente autorretratos, de artistas desde el renacimiento a la fecha. En dicha plaza encontramos varias estatuas al estilo griego, como se imaginarán, pues son en mayoría obras impúdicas ( ja ja de hombres desnudos), esto se debe a que, para los artistas la perfección externa era el reflejo de la perfección interna y solo el cuerpo masculino tenía dicha perfección (...) Las obras son todas originales, expuestas en la plaza a excepción de dos de ellas: Hércules matando al centauro y..... "El David" de Miguel Ángel.En un principio se encontraba en ésta plaza El David original, pero, como los florentinos tienen fama de ser muy pelioneros, se presentó una trifulca donde el pobre salió perdiendo, pues alguien lanzó un sillazo que le terminó tirando un brazo, y se optó por moverlo a la Academia de Arte, muy cerca de ahí (pero atascado de gente, así que no pudimos entrar). Más adelante pasamos por una iglesia que, por todos lados tiene estatuas de bronce de todos los santos patronos de todos los gremios que en ese tiempo tenía Florencia, hechos por Giacomo Celini, autor también de una estatua de bronce de "Perseo", situada también en la plaza ya mencionada. Pasamos por la casa de Dante Alighieri y la de su esposa cuando aún no era su esposa, pues eran vecinos, y caminando hacia la catedral de nuevo, se soltó un tormentón, que no duró tanto tiempo pero si fuérte y hasta provocó una pelea entre un vendedor de un local y la gente que se quería cubrir bajo su marquesina. Nos llevaron borregamente a comer a una restaurante junto a la plaza de San Lorenzo, les digo que nos borreguearon porque con la lluvia tan fuérte todos corrimos detrás del guía pensando solamente en cubrirnos del agua, pero sin más ni más, ya estábamos sentados en una mesa pidiendo pizza (sí... de Italia!!!) y un bisteck a la florentina que pesaba 500 grs... pero dejando ese pasaje amargo y caro, nos fuimos a pasear por nuestra cuenta, entrando ésta vez a la catedral y fotografiamos un "fresco" que representaba "El juicio final" en la cúpula llamada "El Duomo" (domo). El arquitecto que hizo ésta cúpula tuvo todo un reto, pues es de base octagonal y le quedó tan bella, que el mismo Miguel Ángel, cuando le encargaron la cúpula de la Basílica de San Pedro en Roma, le dijo a éste arquitecto que iría a hacer algo más grande (en tamaño) que su cúpula, pero que no la podría igualar en belleza. De regreso al hotel, nos desviamos un poco para pasar frente al museo hebráico y la sinagoga, no pudimos entrar porque estaba cerrado pero la vismos desde afuera. Encontramos que en Florencia hay una estación de tren, así que fuimos de una vez a imprimir los boletos que ya estaban comprados para ir a Asis el proximo domingo. Pasamos a cenar y regresamos a descansar.Ésta ciudad, artísticamente es muy bella, aunque esté llena de italianos groseros y abusivos, aquí se resalta más el arte que la moda o cualquier vanalidad como en otras ciudades de Europa. ¿Que interesante, no?

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Eru kaluva tielyanna (Dios iluminará tu camino)
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"Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor. Si tienes el amor arraigado en ti, ninguna otra cosa sino amor serán tus frutos." (San Agustín) Solamente asegúrate que en realidad sea AMOR...