Día 1 - Diario de nuestro primer viaje a Europa - Lore y Javis

29 de julio - 30 de julio 2007
México - Gran Bretaña
México-París-Londres
Volamos 10 horas desde la ciudad de México en un avión grande y cómodo a París. Nos dieron de cenar y de desayunar, aunque en México apenas era de madrugada cuando desayunamos, y pudimos ver películas, jugar o hasta ver los Simpsons en francés o inglés en tu propia tele. También podías ver si querías información sobre la ruta que ibas siguiendo: velocidad, temperatura exterior y en mapas a distintas escalas el punto exacto en el mundo en que se encontraba el avión en ese momento. Para ser clase turista, valió la pena :)
Lo malo fue cuando llegamos al aeropuerto Charles de Gaulle en París, pues la llegada original estaba programada para las 14.10 y por retrasos que comenzaron desde el tráfico en tierra de México llegamos 14.30. Teníamos que transbordar para tomar nuestro primer destino: Londres, y no contábamos con que el aereopuerto es enorme. Incluso había que tomar un trenecito, un camión y caminar largos pasillos para llegar a distintas salas o secciones del mismo aereopuerto. Y sin embargo, todo estaba SOOOOLO, casi no se veía gente, de tan gigante que era el aereopuerto. Lo malo es que desde donde llegamos teníamos que movernos vía trenecito y camión a un extremo del aereopuerto que estaba ahí enfrentito de donde llegamos, pero como no puedes atravesar las pistas, tenías que rodearlo TODO siguiendo la ruta. Para cuando bajamos del camión ya eran 3.05pm en Paris, y el avión salía a las 3pm!!! Pero teníamos esperanza aún. No contamos con el control interno de entrada al aereopuerto, o más bien para llegar a las salas de abordaje. Ahí tuvimos que vaciar todo, mostrar todo, y tirar varias cosas de nuestro equipaje que estaban prohibidas para subir al avión con nosotros: (la crema de afeitar de Javier, un desodorante en aereosol, perfumes, crema para peinar y un par de juguitos que querían obligarnos a beber ahí mismo sino los tiraban (drink it! now!!) pero como queríamos llegar a nuestro vuelo, mejor los dejamos). Y lo bueno que no nos quejamos de nada, porque si lo hubiéramos hecho, nos hubiera pasado como al señor que estaba junto: venía también de México y se puso bien loquito con los franchutes, y pues estos bien orgullosos lo retaron, le gritaron que sino le gustaba llamaban a la policía, y el otro muy orgulloso que les dice 'pues traiganla!' (todo esto en francés gritado). Y pues ya no supimos que fue de él, pero por su culpa también nos retrasamos un poco más. Quien sabe de donde venía, igual era extranjero, pero por como se puso, se me hace que venía del DF...
En fin, llegamos corriendo a la puerta correspondiente en la sala de abordar y para colmo de males había otro par de franchutes peleando por quien sabe qué, y los mandaron a reclamar a otra mesa. Luego nos dimos cuenta que reclamaban por la misma situación en la que estábamos: habían perdido el vuelo, por el retraso en el vuelo en que llegaron, igual que nosotros...
El punto es que no discutimos y nos atuvimos a lo que no nos quedaba de otra: nos transfirieron a otro vuelo, que saldría 2 horas después. La verdad no se portaron mal ni nada, la culpa venía desde el aereopuerto Beno Juárez, y pues como no nos quedó de otra esperamos un rato ahí.
Llamamos a la central en España de la agencia con quien teníamos que vernos en Londres, y nos dijeron que intentarían localizar a la persona que nos iba a esperar en Heathrow (el aereopuerto internacional de Londres) para que nos esperara. Fuimos a conseguir dinero en Euros (moneditas) para volver a llamar, y cuando regresamos la llamada, nos dijeron que haber si se podía!!! que si no, tomáramos un taxi al hotel! como si lloviera dinero, y más en libras que están super caras! (si el Euro está en $15, la libra esterlina está en $22).
En fin, subimos al avión y en menos de lo que cantas me fui a Huatulco, llegamos a Londres. Ahí, luego de pasar el control de inmigración fácilmente (no son tan payasos como en Francia), y de esperar un bueeeen rato las maletas, y de que un perro inspéctor se acercó a la maleta de Lore por la comida que llevábamos (conservas para aguantar y no gastar tanto en comida acá), obviamente, no había nadie esperándonos, y volvimos a llamar, y nos dijeron que no, que llegáramos por nuestra cuenta, que nadie iba ir por nosotros, y otra vez el tonto cuento del taxi, y hasta nos dijeron (jaja!) que reclamáramos con la factura del taxi en el aereopuerto, para que nos reembolsaran eso, que porque fue su culpa (se ve que no conocen México!!!) En fin que decidimos irnos como peces en el agua: usar el metro, que por cierto en Londres está muy bonito, no tanto como el de México, pero yo creo (Javier) que a los ingleses les gustan mucho los trenecitos, porque su metro es como un tren, pero bajo tierra, chiquito, con vías y estaciones bien monas que parecen como de tren, pero bajo tierra. Lo que si me gustó fue el trayecto por arriba del suelo, cuando se llegaba a ver las casas y los campos, bien peculiares y pintorescos.
Luego de un buen rato, pero que no fue incómodo y valió la pena, llegamos a West Brompton (pronúnciese con acento marcadamente inglés), y de ahí caminamos por avenida Lillie Road, unos cuantos metros hacia el hotel por fin.
Llegamos rápido al hotel, todo empezaba a parecer sencillo, el hotel a la vista, nos atendieron rápido, encontramos al señor encargado del tour, y nos topamos con que muchos otros integrantes del mismo tour (unos cincuenta y tantos) sufrían de los mismos problemas de retrasos en aviones y demás. Nos hospedamos en la habitación 455, y aunque la tarde (más bien noche, eran las 9pm y parecían las 6.30pm!) pintaba para ir a caminar, decidimos descansar, acoplarnos al horario, bañarnos y organizarnos para el siguiente día en que tendríamos nuestro primer paseo.
Abrimos las maletas para sacar un poco de comida, y oh sorpresa! la ropa de Lore se nos adelantó, y se tomó el almibar de dos de nuestras latas, chale! En fin, nada que una buena lavadita no fuera a arreglar...
A ver que nos espera el día de mañana...


--
Eru kaluva tielyanna (Dios iluminará tu camino)
Visita la página de la Casa de la Juventud, TOR: www.torcasajuv.com
"Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor. Si tienes el amor arraigado en ti, ninguna otra cosa sino amor serán tus frutos." (San Agustín) Solamente asegúrate que en realidad sea AMOR...