Pascua con Amigos
Experimentos en la experiencia de encuentros cristianos virtuales y a distancia
En una entrada anterior platicaba sobre cómo viví la Pascua 2022 junto con mi familia. Luego del cierre de la Casa de la Juventud la verdad pensaba que iban a ser nomás unos días de descanso, en los que quizá asistiría a misa, y no mucho más.
Haciendo eco de lo que decía en esa otra entrada, de que desde hace mucho he sentido ese llamado del "ve y anuncia", el Señor no me dejó "en paz" y me llamó.
Mi comadre Malú me preguntó si me interesaba hacer algo para estos días. La verdad es que tomé la pregunta con cierto escepticismo, porque la pregunta vino tan solo 9 días antes de los días en que solían organizarse las actividades de Pascua en la Casa de la Juventud, el Jueves Santo. Era martes y mi primera impresión fue "¡pero si sólo queda una semana!" En la Casa de la Juventud solíamos preparar estas cosas con al menos 2 o 3 semanas de antelación, incluso en los dos años pasados que hicimos encuentros puramente virtuales (con plataformas de videoconferencias) por la pandemia.
Pero luego de la primera impresión, y luego de acordar que algo presencial iba a ser dificilísimo de organizar con tan poco tiempo de antelación, pensamos en hacer de nuevo algo remoto y quedamos de platicarlo más tarde ese día.
Luego de esa plática me convencí que era una buenísima idea, y me sumé al proyecto :) Igual por el llamado, como por el deseo de no dejar pasar estos días sin más novedad, como por experimentar un poco fuera del contexto que ya venía trabajando desde hace años, me aventé. Y acordamos varias cosas: las reuniones que haríamos, la temática, la plataforma que usaríamos (elegimos pagar un mes de zoom para esto), y hasta el nombre del evento, que no podía ser el mismo que ya sabíamos de la Casa, porque la Casa ya no estaba y porque pues no podíamos apropiarnos del movimiento, nomás era un algo que intentamos para que no pasara desapercibido. Así quedó el título:
Pascua con Amigos, 2022
Y comenzamos a trabajar, con la premura de menos de una semana. Uma imagen promocional, con horarios ya definidos:
Lo primero a destacar es que no pensamos en tantas reuniones por día. Con el poco tiempo iba a ser difícil organizar algo más. Pero con una reunión diaria, y que en todo el esquema pudiéramos incluir momentos para dar tema, pero también hacer oración, nos aventamos.
Creo que lo más importante aquí es que decidimos estar dispuestos a experimentar. Aprovechando la coyontura, que no éramos el mismo movimiento, pues había que dejar MUCHO espacio para probar cosas nuevas...
Por ejemplo, el tema. Aunque sacamos ideas de folletos de temas de Pascua anteriores, el concepto no era uno que ya se hubiera trabajado antes. Y el material igual salió de búsquedas en internet. Una cartilla de los obispos de Colombia sobre el compromiso y la participación política de los cristianos, el tema del compromiso de Jesús en su tiempo, tomado de alguna Pascua de hace unos años, y buscar aterrizar eso en un compromiso personal a partir de la Resurrección más o menos armaron el esqueleto.
Otra cosa, las reuniones. No íbamos a poder dar tema cada día, celebrar u orar cada día, ni tener ensayos de cantos y demás cosas bonitas. Sobre todo por el poco tiempo con que contábamos. Pero nos atuvimos a lo esencial: el Jueves sería dar tema, sobre Jesús y su compromiso con el Reino de Dios y todo lo que eso significa.
El viernes no daríamos tema, sino que sería un momento de oración/celebración, donde el énfasis sería: ya que Jesús vivió a tope y con coherencia absoluta el mensaje del que hablamos el jueves, eso ¿a qué lo llevó? a la muerte en cruz, plenamente aceptada por él. Pero aquí viene uno de los experimentos más interesantes: queríamos que los participantes también formaran parte de ese momento, que trabajaran o elaboraran algo para participar del momento de oración, y no sólo mostrarles un esquema previamente preparado por nosotros. Más abajo cuento esa experiencia, pero básicmante por eso el viernes incluyó una mini-reunión por la mañana, para poder organizar lo que pediríamos a cada quien.
El sábado por último tendríamos una reunión un poco más larga, para dar un tema de corte más personal para aterrizar la experiencia de Resurrección en cada uno, y un momento de oración final.
La definición de los horarios de reuniones, y un poco el estilo que seguiríamos, también fue resultado de un experimiento interesante. En lugar de definirlo previamente, colocamos varias opciones en la mesa, y luego lanzamos una pequeña encuesta en redes sociales, para conocer la opinión de posibles interesados en participar. Y en vez de plantearles un horario hecho por nosotros, elegimos uno basado en unas pequeñas tendencias que notamos.
La preparación previa también fue un área en la que experimentamos. Como decía más arriba, solíamos preparar estos encuentros con dos o tres semanas de antelación. En este caso no contamos con eso, y simplemente acordamos ir avanzando día a día en los pendientes, y comunicarnos vía Whatsapp para ir afinando todo, también creamos un espacio en una nube para subir TODO lo que hiciéramos, así quedaba en común. De nuestros primeros pendientes estaba preparar la encuesta para elegir horarios. Una vez elegidos los horarios, sacar la imagen promocional que mostré más arriba. Redactar un texto para un tema, preparar alguna presentación, leer textos... Ir recabando inscripciones vía Whatsapp. Todo eso fue novedoso, para mi al menos, y lo que gratamente más me sorprendió es que iba funcionando.
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| Este fue el espacio donde metimos todo lo que creamos |
La promoción la hicimos por los medios habituales, nuestras redes sociales, y llegamos al jueves con varios inscritos: once, otra grata sorpresa! Todos ya conocían la Casa. Algunos nunca entraron a un encuentro virtual, y había algunos que tenían AÑOS sin pisar la Casa. Y una sorpresa más: se terminó uniendo una persona nueva, que ni siquiera nos conocía :-)
Jueves
Aunque el tema del jueves lo trabajamos un poco como ya lo hacíamos, con una presentación, la intención fue provocar mucho diálogo, así que traté de dejar mucho espacio a preguntas y opiniones. De los temas que elegimos era de los que tenían que manejar más carga teórica, así que por eso elegí basarme en una presentación. A la que le incluí un video también:
Si quieren verla, aquí les comparto mi presentación: https://docs.google.com/presentation/d/1__Nl9dSkuU-CGiQXnToryxY3qSKQJv3VHpj0BZB7y-Q/edit?usp=sharing . Por cierto el material se puede compartir y se puede usar también.
Viernes
De lejos este es el día que me pareció de lo más interesante. Primero por la dinámica que quisimos intentar: que los participantes trabajaran juntos, y que crearan "algo" para formar parte del momento de oración que tendríamos por la tarde.
¿Cómo lograr que los participantes: trabajen juntos, colaborando en un objetivo específico, en remoto? Se nos ocurrió formar grupos de WhatsApp, uno por equipo. A cada grupo le daríamos sus instrucciones por separado, y nosotros estaríamos dentro de los grupos para dar seguimiento.
Nos reunimos brevemente por la mañana para darles dos indicaciones importantes:
- sobre la dinámica de trabajo por equipos y el objetivo a conseguir
- una actividad que haríamos durante la oración implicaba tener un material previamente preparado, así que todos tendrían trabajo doble: el de su equipo y el preparar este material
Por cierto, no pudimos preparar nada para las 3pm, hora de nona. Pero aprovechamos los grupos de Whats para compartiles un par de textos y a cada uno le pedimos desde la mañana no olvidar hacer oración por su cuenta en sus casas:
Los crucificados de hoy y el Crucificado de ayer
Respecto al trabajo en equipos para preparar algo para la oración de la tarde, confieso que si me daba mucha incertidumbre al pensar que quizá no se lograría. Pero se logró, ¡y muy bien! Incluso con sus momentos cómicos (como incluir por accidente a una persona que no estaba ni en el encuentro y ni nos conocía xD ), todos los equipos hicieron un genial trabajo, y todos pudieron tener su material listo para el momento de la tarde.
Les comparto aquí los materiales que prepararon los equipos:
Equipo 1: una oración de arrepentimiento, por la muerte de Jesús
https://docs.google.com/document/d/1gkV_8l5Q2jiTTdoj0ZPGbVR5Yqm37LfAe3BD4i_MMqY/edit?usp=sharing
Equipo 2: una oración donde se muestre la disposición por cambiar, que esos lugares donde Cristo aún es crucificado sean cada vez menos https://docs.google.com/presentation/d/1le-bJwhfs_rctMUegjdxOJAz-_o3S2qkKSy-wVvKiW0/edit?usp=sharing
Equipo 3: una oración pidiendo a Dios estar dispuestos para atrevernos a trabajar por su Reino como lo hizo su Hijo. Se basaron en la "Envíanos locos" del folleto de oraciones del "Loado" de la Casa de la Juventud
Equipo 4: un video-oración que sirviera de motivación al final del momento
https://drive.google.com/file/d/1gSHcmksvWjo2Qyshb9wk95HIrXTnMOwF/view?usp=sharing
No detallaré los momentos de la celebración, pero les dejo las diapositivas:
https://docs.google.com/presentation/d/1O5lBGWxqyaUAI8UjmWsgDDfxRM6IhP9i_d4JiC-pxMc/edit?usp=sharing
Al final fue una experiencia muy bonita, con la participación de todos. Donde, espero, los participantes pudieron formar parte del momento más allá de espectadores, como lo que son: participantes.
Sábado
Para el último día tratamos de definir un tema y una vivencia más personal. Sí, el mensaje de Jesús impacta a todos, y sí, su muerte nos salva a todos. ¿Eso como se vive en lo personal también? ¿Cómo dar un mensaje de que, para vivir la Resurrección que cambia al mundo también hay que trabajar en uno mismo?
Más que preparar un tema con un esquema bajo una presentación, dimos una plática, un diálogo. Y lo juntamos con un ejercicio muy interesante sobre las emociones. Algo que nos diera pie a eso: comienza a trabajar en ti mismo también, porque si vas a ir a anunciar la Resurrección y el Reino de Dios, tiene que ser porque estás convencido tú, y porque tú también has trabajado en tí, no porque te obliguen, no porque los demás lo hagan, sino porque tú estás convencido.
Cerramos con un momento de oración muy bonito, y que además ¡no preparamos como tal! Los dos decidimos que durante el día si se nos venía a la mente algo que compartir y hacer, que eso saliera, sin más...
Al final pusimos esto:
una canción:
una oración del Loado:
y otra canción:
Mas oración espontánea y un Padre Nuestro al final...
quedó muy bonito...
La experiencia
Para cerrar, diseñamos una pequeña encuesta para nuestros participantes, para entender cómo vivieron todo, y qué comentarios nos harían. Y ¿quién sabe? si nos aventamos a hacer algo más, para saber qué funciona más y qué no. Eso también fue nuevo, directamente preguntarles, de forma anónima, sin esperar si alguien nos decía algo útil o no, y muy concreto para evitar puros cebollazos y alabanzas. Necesitamos saber cómo mejorar.
Con preguntas tanto estadísticas (edad y género), de opinión de cada dinámica que hicimos, si debíamos seguir en remoto o presencial, posibles costos de recuperación, en fin. Datos útiles para hacerlo mejor en cada ocasión.
Puedo recabar muchos aprendizajes de todo esto. En especial:
- las ganas de hacer algo, no dejarlo pasar
- los medios y trabajo colaborativo, tanto en la nube como con whatsapp
- el respeto mutuo al trabajo del otro. Si yo proponía algo Malú lo validaba dando su opinión, y viceversa. Sin pisarnos, sin criticarnos
- el arriesgarnos sin temer si podría salir mal o no, arriesgarnos y ver directamente por el resultado si había o no funcionado (así metimos el trabajo por equipos del viernes, la oración sin esquema del sábado, la encuesta para definir horarios y reuniones, etc.), en lugar de prever si podría salir bien o mal, ni prejuzgar si por alguna actitud funcionaría o no
- la improvisación jugó mucho su papel. De repente se nos ocurrió poner algo para proponerles hacer oración en la hora de nona del viernes, de repente se nos ocurrió que el tema del sábado, que iba a ser sólo tema, incluyera algo de oración, muy espontánea. Y la verdad nuestra actitud fue: "pues veamos que sale!" si no probamos, no sabremos si habría funcionado o no, así que mejor arriesgar, a perder la oportunidad
- claro que salieron cosas mal (pero no desastrosas). La improvisación podría haber dado pie a algunas de estas, pero jamás nos recriminamos por eso. No tenía que salir perfecto, sólo debía funcionar. Asi que los errores, técnicos durante alguna presentación, o los que fueron producto de alguna improvisación, no nos los recriminamos, nomás aprendimos de ellos. Y de nuevo, dejar hueco a improvisar permitió que salieran cosas super bonitas, como la oración del sábado.
- el considerar la opinión de los demás. Tanto para definir horarios y cantidad de reuniones, como para la encuesta de cierre. Por saber qué podemos ofrecer que sea atractivo y por mejorar en futuras ocasiones. La retroalimentación es súper importante, y debe ser más allá que recibir aplausos o agradecimientos
- Y lo más importante. El equipo que hicimos. Nunca nos consideramos nosotros dos solos, no dejamos de repetirnos que fuimos tres trabajando: Malú, yo, y siempre presente el Espíritu Santo inspirándonos e impulsándonos a arriesgar. ¿O de quién creen que salió el ímpetu, la improvisación y el que todo saliera así, simplemente BIEN?
¡Veamos algunas fotos!
Aquí no nos vemos todos los que participamos los tres días, pero si varios:
¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!
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Eru kaluva tielyanna (Dios iluminará tu camino)
"Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor. Si tienes el amor arraigado en ti, ninguna otra cosa sino amor serán tus frutos." (San Agustín) Solamente asegúrate que en realidad sea AMOR...
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